En las manos de Pardew

He de decir que antes de que comenzara la temporada del Crystal Palace, y viendo cómo había acabado la anterior el equipo, me motivaba mucho ver a Tony Pulis al frente de este nuevo proyecto. Siempre he pensado que Tony Pulis no es de los técnicos más bonitos (en cuanto a juego se refiere), pero si me parece de los más efectivos. Efectivo porque sabe sacar el mejor rendimiento de lo que tiene. Es un maestro en la materia, y aunque ha pasado casi toda su vida entrenando al Stoke City, la épica que le rodea como entrenador me parece preciosa a la vez que elogiable. Pocos entrenadores se han ganado siempre tanto respeto con tan poco.

Pero con la temporada llamando al timbre, unas discrepancias entre Tony Pulis y los altos mandos del club, hicieron que el técnico galés dejara el club a toda prisa (en una ruptura de su contrato por mutuo acuerdo). Sin él, llegó Neil Warnock, un entrenador que ya había entrenado al Crystal Palace desde 2007 hasta 2010. Todo esto, que fue muy rápido y con mucho alboroto, hizo que el Crystal Palace comenzara la temporada sin frenos y cuesta abajo. La caída era inminente, y ni Warnock ni nadie parecía poder encontrar la solución adecuada para tomar un buen rumbo. Los malos resultados que respaldaron al técnico inglés hicieron que acabara siendo destituido. Así, el 27 de diciembre de 2014 acababa su segunda etapa como entrenador de los eagles.

En puestos de descenso, sin ningún tipo de motivación y con un futuro poco esperanzador, en el Crystal Palace fijaron su próximo objetivo para el banquillo en un antiguo ex-jugador del club. Alguien que conocía la casa y sabía cómo funcionaban las cosas allí. Alan Pardew era el elegido para intentar resolver todo lo irresoluble dentro del club. La situación del técnico francés en el Newcastle facilitó su salida rumbo a su nuevo club. Y parece que todos quedaban tan contentos. El Crystal Palace veía como llegaba uno de sus jugadores más ilustres en la etapa de 1987-1991. Alan Pardew llegaba a un sitio donde se sentiría querido, y donde seguramente podría explotar más sus cualidades. Y el Newcastle...perdía de vista a uno de sus dolores de cabeza.

Y parece que la llegada de Pardew si supuso un punto de inflexión para el Crystal Palace. Bueno, se podría decir que tanto para el equipo como para él mismo. Se reencontraron consigo mismos, y consiguieron revertir una situación que desde todas las perspectivas parecía ser catastrófica. Haciendo algunas modificaciones en las formaciones, y sacándose un as de la manga para recuperar a ciertos jugadores, Pardew consiguió hacer creer a sus jugadores en que el equipo podía y debía estar más arriba. Y ese puede que sea uno de los grandes logros del técnico francés, el haber conseguido que sus jugadores se implicaran y dieran el 110%. Una implicación que hasta su llegada era cuestionable, y que solamente se veía interrumpida por el talento de Bolasie.

• Zaha y Glenn Murray se han convertido en dos de esos jugadores de los que Pardew ha conseguido sacar todo. El primero llegó como cedido del Manchester United (es ex del club) y ha acabado volviendo para quedarse. Pardew le ha convertido en uno de sus insustituibles por la banda izquierda, y de momento Zaha parece recuperar esas sensaciones que le hicieron ser un jugador imponente en Championship. Por su parte Glenn Murray parece haberse convertido en el 9 favorito del francés (su llegada coincidió con la vuelta de este delantero que estaba cedido en el Reading). Un delantero peleón, que no da balón por perdido y que tiene muy buen aguante con la pelota. Un delantero que refleja lo que busca Pardew con su llegada: luchar, luchar y luchar. Glenn Murray acumula 6 goles y 3 asistencias, por lo que la confianza que depositó en él está más que respondida.

• El mover a Puncheon de posición se ha convertido en otra de las claves del equipo. Este extremo zurdo habilidoso ha mostrado una faceta totalmente desconocida en él. Con Pardew, el 4-3-3 ha sido el sistema más utilizado, y con esto, para poder encajar a Bolasie y Zaha arriba, Puncheon se vio sacrificado a jugar como interior en el equipo. Algo que beneficio al equipo, y que posiblemente le haya beneficiado a él como jugador para crecer. Su rendimiento se ha visto mejorado, y su peso dentro de los partidos multiplicado. Sigue teniendo jugadas características del jugador que es, pero su sacrificio a la hora de defender, y su llegada a la hora de atacar, se han convertido en algo muy importante para el equipo.

• El 4-3-3 que ha impuesto desde su llegada ha posibilitado al equipo sacar su mejor imagen. La defensa (que es una línea de 4 donde los 4 defensas que hay podrían ser perfectamente centrales) se ha visto beneficiada por las ayudas que recibe, tapando más los errores que podían tener. El ataque por su parte se ha visto potenciado. Teniendo un juego que sobre todo consiste en atacar por las bandas debido a los jugadores que hay en esa zona, el Crystal Palace ha conseguido potenciar sus ataques, que se ven además beneficiados por tener un delantero rematador como Glenn Murray. El 4-3-3 ha ocultado carencias y ha permitido mejorar las potencias del equipo. Pardew dio con la clave para conseguir que llegaran los buenos resultados de esta forma.

Desde que tomó los mandos del banquillo, el equipo notó rápidamente en resultados todo lo que había implicado su llegada. En los primeros siete partidos desde que Pardew se hizo con el cargo, solo perdieron uno, por 6 victorias y un empate. Con todo lo que ello conllevaba, el Crystal Palace consiguió salir de la zona de descenso y comenzar a luchar por hacerse un hueco en la zona media de la tabla. Esto ha hecho que el técnico francés tomara los debates de los medios ingleses sobre si podría ser el entrenador de la temporada por lo que había hecho con el Crystal Palace. A día de hoy, pese a que sus estadísticas han empeorado un poco, en los 18 partidos que ha dirigido a los eagles, los resultados son tal que así: 10 victorias-1 empate-7 derrotas. 7 derrotas que llegan con un equipo más "relajado" por la situación de calma que pasa en este cierre de temporada (aunque no pueden dormirse).

Si una palabra debe ir al lado de Alan Pardew ahora mismo es la de resultado. Con Neil Warnock el club sacó un total de 17 puntos en Premier League en la etapa que estuvo el entrenador inglés. Con Alan Pardew el equipo ha conseguido alcanzar los 25 puntos a falta de 3 jornadas por disputarse. Un dato significativo si echamos un ojo atrás y vemos que hasta hace unos meses el equipo era carne de Championship. Además algunas de las victorias que ha obtenido en este periodo no han sido para nada fáciles, ante rivales duros y de la tabla alta: Tottenham, West Ham o Manchester City han probado lo que es perder ante el Crystal Palace de Alan Pardew.

Posiblemente el Crystal Palace no sea el equipo que mejor fútbol hace. Es más, el estilo parece el mismo que utilizó Tony Pulis para sacar la temporada pasada al equipo del pozo también. Y puede que esta sea la línea a seguir. Pardew ha encontrado sensaciones que se encontraron con Tony Pulis cuando dirigió al equipo. Seguramente el destino no sea el mismo porque el contexto de ambos entrenadores con el club es muy diferente. Mientras tanto, y mientras se cierra la temporada, el trabajo del técnico francés es inmaculado, como el de su equipo desde su llegada.