Zancada a zancada parece que se va reencontrando consigo mismo. O al menos es lo que mejor le define. Tras su efímero paso por el Manchester United, donde tuvo más quebraderos de cabeza que posibilidades de adaptación, o incluso de hacerse un hueco, Wilfried Zaha volvió al lugar donde mejor le conocían. El lugar que le llevó a debutar en la selección absoluta de Inglaterra jugando en Championship. No es una tontería. Volver al lugar donde más cómodo estuvo para volver a reencontrarse consigo mismo, o con el fútbol que le hizo hacerse un nombre codiciado entre los grandes equipos de Inglaterra.
El Crystal Palace le acogió con los brazos abiertos, y en su vuelta a vuelto a ganar importancia poco a poco, y consistencia. Con más años y en una categoría superior, el joven extremo sigue siendo importante para su equipo. Tal vez no sea el clásico regateador que acostumbra verse en banda, pero se gana la palma por su forma de jugar. Es importante para el Crystal Palace porque por la banda enriquece el juego del equipo y se empeña en superarse en cada jornada. Zancada a zancada...Zaha regatea por potencia y rapidez, porque sus piernas son largas y sus pasos llegan más lejos, y antes, que los del rival a por el balón. Es bueno para su equipo porque tiene potencia, y es habilidoso. En un equipo donde la verticalidad se palpa con Bolasie, Sako, Puncheon...Zaha es otro de los que nutren al equipo.
Rara vez se le ve fuera de su hábitat, porque ahí es donde aprovecha sus cualidades. Por la derecha reta a sus oponentes a correr la banda, y con alguna virguería o algún regate de esos que gustan tanto en la grada se lleva la palma. Se tira el balón hacia delante, frena, corre, cambia de ritmo...Tiene mucho que mostrar y lo refleja cuando tiene el balón en los pies. Sabe combinar, aunque es más de aprovechar sus individualidades, tal vez algo que tenga que mejorar para seguir madurando como jugador. En defensa se sacrifica y por ese motivo muchas veces se le ve conducir al ataque...¿Y una vez se planta cerca de la portería rival? Pisa línea de fondo y lanza buenos centros, elevados o rasos, o incluso desborda hacia dentro cuando juega por la izquierda y sorprende con algún tiro con potencia.
Wilfried Zaha ha vuelto al Crystal Palace para volver a ser el que era, o al menos para volver a tener la etiqueta que una vez se le puso. Tal vez de forma más lenta, tal vez con menos cosas que le llenen la cabeza, pero en casa vuelve a estar feliz, y eso se nota en su juego. El Manchester United en su día pagó 15 millones de libras por él vislumbrando su gran futuro (con un contrato de cinco temporadas y media por delante). Acabó volviendo al Crystal Palace por 6 millones de libras con un contrato de cinco temporadas y media (confiando el equipo londinense en que algún equipo volverá con más fuerza a por él). De momento sigue evolucionando, más desde la sombra que cuando brilló en Championship, pero de la misma forma eficiente. Solo hace falta esperar, pero Wilfried Zaha ha vuelto.
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