Bajo el mando de van Dijk

Fotografía: liverpoolfc.com

No es algo nuevo que la gran tarea del Liverpool de Klopp desde su llegada es mejorar en el aspecto defensivo. Aunque evolucionado, al equipo del técnico alemán lo que más le cuesta es mantener la compostura cuando no tienen la pelota. Y es por esto que sin ella, en muchas ocasiones, las piezas se desequilibran y acaban concediendo más cosas de las que pretenden. Con altibajos, el nivel defensivo ha ido variando a lo largo de la temporada. Aunque ha habido un aspecto importante para que se haya dado un paso adelante en este aspecto y el equipo haya mejorado: la llegada de van Dijk.

El salto cualitativo en el centro de la defensa fue importante, pero más aún lo fue el contagiar a toda la línea del liderazgo de un futbolista que ya había demostrado en el Southampton que podía ser el que comandara a la defensa. Es por eso que el Liverpool mejoró sus números en defensa, pero sobre todo sus sensaciones. No solo la llegada del holandés supuso una mayor tranquilidad para la portería, sino que jugadores como Lovren, Robertson o incluso los jóvenes Joe Gomez y Alexander Arnold mostraron bastante solidez para que su equipo mejorara atrás.

Hay varios aspectos que hacen a van Dijk un central idóneo para el Liverpool. Y sobre todo, sus puntos fuertes hacen que el crecimiento en la parcela defensiva sea importante para que el Liverpool no solamente mostrara una buena imagen defensiva en Premier League, sino que haya conseguido llegar a la final de UCL. Si hubiera una palabra que pudiera comprimir todo lo que se pensaba que iba a aportar y ha aportado es solidez. Y es que el futbolista holandés ha ofrecido algo que al Liverpool le hacía falta, y era llegar a la solidez defensiva a través de la seguridad cuando no se tiene el balón. Gracias a él se ha levantado una línea que, necesitando refuerzos en el futuro, ha comprendido que para hacer las cosas bien posiblemente necesitan el doble de esfuerzo que otras defensas.

Van Dijk es un central que ha dotado a la defensa de una mayor concentración. Su aporte sin pelota va ligada a la de un alma representativa que necesitaban el equipo atrás. El Liverpool ha conseguido defender mejor sin pelota de muchas formas. Sus laterales se muestran más sólidos, sufren menos, y el que le acompaña en su sector que es Robertson, ha dado la posibilidad a su equipo de encontrar también un lateral izquierdo que sin balón sea un hueso duro. Nombre por nombre todos rinden mejor, y eso se nota porque los demás defensores a su lado tienen alguien que les otorga tranquilidad. Esto se ve reflejado en el nombre de Lovren sobre todo, que parece haberse contagiado de su compañero. Otro central que llegó del Southampton con un buen nivel demostrado, y no ha conseguido reflejar lo que si hizo con su anterior club. Van Dijk es un corrector para la defensa, ese futbolista que sabe medir bien los espacios, y es completo para medirse a cualquier tipo de rival. Sabe correr bien para defender espacios, medirse en zonas más comprimidas...Un defensa completo que no solo aporta por sí mismo sino que se preocupa de que los demás aporten.

El central holandés es uno de los mejores defensores en los balones aéreos. Su poderío físico le dan la posibilidad de ser un futbolista que de cabeza vaya bien, pero además a la hora de defender mide bien hacia dónde van los centros y también es capaz de moverse con rapidez interpretando la trayectoria de la pelota. Esta capacidad aérea le da la posibilidad de ser un gran recurso también ofensivamente. Pese a ser corpulento, es un central que en ataque aporta a balón parado ya que tiene agilidad para buscar el remate. De esta forma, es un defensa capaz de dominar las áreas en las jugadas a balón parado. Y este aspecto para su equipo, tanto en defensa como en ataque es importante. En su propia área porque el Liverpool es un equipo que ha venido sufriendo en este aspecto, añadiendo que no tienen porteros que se impongan con contundencia por arriba. Y en ataque porque es preciso a la hora de impactar con el balón, y eso siempre es una opción de peligro.

El plus de van Dijk para su equipo se ha notado desde un primer momento. Su llegada es uno de esos grandes alicientes para que vayamos a ver al Liverpool jugar una final de UCL. Posiblemente sea el central perfecto para paliar todos los puntos débiles del equipo de Merseyside. Y de esta forma, no solamente lo ha agradecido el equipo como conjunto, sino que para Klopp ha sido una bocanada de aire para que en más de una ocasión se haya mostrado una buena versión atrás de su equipo.