Entregarse a los de arriba

Complicado determinar hasta qué punto ha mejorado el Liverpool en los últimos tres partidos respecto a lo que venía mostrando en las 16 jornadas anteriores. A Brendan Rodgers le dio por rebuscar en el baúl de las soluciones y dio con varias cosas que podían cambiar al equipo, o al menos cambiar parte de él. Impuso en su táctica el 1-3-4-3 que ya se le había visto utilizar alguna que otra vez la temporada pasada, y a su vez prescindió del uso de un delantero para dotar a su ataque de la imprevisibilidad que tienen los mejores jugadores de su plantilla. Del centro del campo para atrás era muy complicado dotar a su equipo con más armas de las que tenía. A Brendan Rodgers se le pedían soluciones por la mala imagen, irregular y poco segura, del equipo, y el entrenador inglés respondió con esto. Con mejor o peor resultado en algún que otro partido, el Liverpool de momento muestra una leve mejoría, mejoría que debería servir para el futuro en la presente temporada.

Abrir la veda

En un momento en el que la paciencia no está siendo la mejor compañera de los entrenadores, la Premier League no pasa por su mejor momento. O más bien, en vez de la Premier League en sí, los clubes de la Premier League no pasan por su mejor momento. En un inicio de temporada irregular, raro y algo anormal donde no todas las cosas están en su sitio, las 18 jornadas que llevamos de temporada han dado para mucho. Rumores y más rumores que no hacían mucho más que dudar de la capacidad de unos u otros entrenadores por el inicio de campaña que estaban teniendo con sus equipos. Ninguna temporada es fácil, pero la 2014/2015 no iba a ser menos difícil si lo pensaba algún entrenador. Una temporada que se acerca más a una montaña rusa que al puro reflejo de la regularidad.

El hombre escoba

Recuerdo cuando el Chelsea no tenía un centrocampista en condiciones. Con centrocampista en condiciones quiero decir alguien que defendiera, atacara de vez en cuando, equilibrara al equipo y con el balón se desenvolviera bien. En las últimas temporadas en el Chelsea han pasado por el centro del campo Ramires, David Luiz, Obi Mikel, Raul Meireles...Jugadores que no son malos, pero tampoco son lo mejor para dicha posición. Cuesta creer que en las últimas 3/4 temporadas el Chelsea haya sobrevivido arriba del todo con un centro del campo tan poco estructurado. Y es que solo hacía falta verlos para darse cuenta de que las ideas del equipo no tenían un punto intermedio, el balón pasaba de la defensa al ataque, que es donde se empezaban a gestar las cosas.

Momentos

Veo a Steven Gerrard y veo al capitán que todo equipo querría tener. Líder, calmado, motivador. He tenido la suerte de verle durante muchos partidos, con sus más y sus menos, haciéndolo mejor o peor, pero liderando. Hay jugadores que nacen con algo especial tras de sí, como si fuera su sombra, algo que se lleva en la sangre. Gerrard lo tiene, y él lo sabe, lo sabe como lo saben los aficionados del Liverpool y como lo sabe cada entrenador que ha tenido. Da igual la edad, eso es secundario, Steven Gerrard ha tenido siempre liderazgo. Ha protegido al club que quiere lo mejor que ha podido, viviendo épocas mejores peores, subido en una montaña rusa, pero con el escudo de su equipo siempre presente. Veo a Gerrard y se me ponen los pelos de punta, en lo que estamos viendo y en lo que le echaremos de menos cuando no esté.

La importancia del revulsivo

Veía al Arsenal jugar ante el Southampton, un muy buen Southampton por cierto, y veía que pasaban los minutos y el equipo de Arsène Wenger no conseguía llegar a marcar gol. Aunque eran ligeramente superiores, les ocurría lo que tantas y tantas veces les ha pasado a lo largo de los años, y es que una vez llegaban a pisar la zona de tres cuartos de ataque las ideas desaparecían. Parece utópico esto teniendo en cuenta que jugaban con Alexis Sánchez, Cazorla, Ramsey...Pero el Arsenal es muy de eso, de formar un espectáculo de magos y que ninguno tenga truco final para que el público salga satisfecho de la cita. El Emirates estaba expectante, y mientras los minutos del segundo tiempo seguían pasando, el equipo seguía chocándose contra sí mismo y los momentos de claridad del Southampton.

Recoger los frutos

Recuerdo que la primera vez que me interesé por Ki Sung Yueng fue cuando GolTV hizo un reportaje sobre él cuando llegó al Celtic y ya había jugado algunos paritdos. Por aquél entonces lo estaba haciendo muy bien en este equipo, y no se hablaba de él como un jugador de presente sino como un jugador de futuro. Se hablaba de él muy bien, e incluso había gente que se aventuraba a decir que por condiciones podía llegar a ser el mejor jugador en la historia de Corea del Sur. Apuesta arriesgada pero nada descabellada si se le veía jugar. Un jugador alto, asiático, de ese tipo de jugadores que salen en el continente asiático. Menudito, con clase, técnica...mucha para la altura que tenía (1'87 metros). Impresionaba verle, impresionaba ver como manejaba la pelota. Ki estaba labrando su camino, su futuro, el que le convertiría en un gran jugador.

Agüero City

No es el nombre de una canción, ni tampoco el de un capítulo de un libro. Pero bien valdría para ambos, aunque actualmente lo que más  representa el "Agüero City" es el nombre de su club, el Manchester City. Si en algún momento se nos ocurrió dudar sobre si Agüero iba a volver a su gran nivel, o incluso si se nos pasó por la cabeza que las lesiones nos podrían quitar momentos de este jugador argentino, nos equivocamos. Y aunque es verdad que en las últimas temporadas Agüero ha tenido un constante tira y afloja con los problemas musculares, jugando y dejando de jugar, no nos podemos olvidar que es del grupo de los elegidos, de los grandes, de los que no necesitan toda una vida para dejar grandes momentos. Y es que Agüero le contamos por momentos, pero no nos podemos olvidar que hoy por hoy él es el precio de su club.