Empatando ante Eslovaquia, Inglaterra quedó como segunda de grupo después de que Gales ganara su partido ante Rusia. En el último partido de la fase de grupos, Roy Hodgson realizó un total de seis cambios en la alineación. Unos cambios que dieron a la selección inglesa algunos aspectos distintos que fueron positivos en el partido.
Henderson como tercer recurso en el centro del campo
En el partido frente a Eslovaquia, Henderson demostró ser de momento la mejor opción para acompañar en el centro del campo a Dier y Rooney. El jugador del Liverpool no solamente fue del os mejores de Inglaterra a lo largo del partido, sino que ofreció fluidez y tuvo una actitud positiva con el balón en los pies. Ayudó en la salida del balón, ofreciéndose siempre como apoyo e intentando buscar rápidamente alguna vía de pase cuando recibía la pelota. Además el hecho de jugar con un mediocentro le daba la opción de descolgarse de vez en cuando para poder así llegar a la frontal del área.
A lo largo de los 90 minutos Henderson fue una constante en ataque y defensa. Siempre supo posicionarse para ser un recurso más y de esta forma ayudar a sus compañeros. Pidio el balón, le dio rapidez y no abusó de retenerlo. Con Henderson en el centro del campo posiblemente Inglaterra, junto al primer tiempo ante Rusia, encontró los mejores momentos a la hora de salir jugando y conseguir dar al juego sentido.
Sturridge y Lallana con libertad
La entrada de Sturridge en lo que ha jugado de Eurocopa ha dado a Inglaterra un recurso en ataque para desatascar partidos. Contra Gales fue fundamental para remontar el partido y conseguir los 3 puntos, y ante Eslovaquia, pese a no conseguir ganar, si fue uno de los jugadores más insistentes en los ataques ingleses. No tuvo todo el acierto del mundo cada vez que tenía el balón, pero si mostró ser un arma peligrosa sobre todo cuando tenía alguien alrededor con quien combinar.
Como ante Gales, Sturridge partió por la derecha. Pero lejos de esto Roy Hodgson le otorgó cierta libertad para que pudiera recoger el balón en el costado y conducirlo hacia dentro. Esto propiciaba que Clyne subiera por la banda derecha, lo cual fue un arma de gran recurso debido a que con el balón en los pies el lateral del Liverpool es un jugador más capacitado que Walker, y por otro lado dio lugar a que por dentro se encontrara en alguna ocasión con Lallana.
Junto a Sturridge, Lallana partía desde la banda izquierda pero en muchas ocasiones también centraba su posición para poder llegar así a la frontal del área o buscar de alguna manera a Vardy. Lallana pese a no estar mostrando su mejor nivel si está demostrando no tirar la toalla. No es de los más destacados pero sí es un jugador que dentro del sistema ayuda bastante. Gracias a él y a Sturridge Inglaterra consiguió crear alguna ocasión de peligro que pudo cambiar el marcador.
La importancia de Dier
No es nada nuevo. Dier fue fundamental ante Rusia, fue fundamental ante Gales y en esta ocasión lo volvió a ser ante Eslovaquia. No solamente es el primer muro de contención a la hora de defender, sino que con el balón siempre hace las cosas de forma correcta. No intenta sobrepasar su labor, y aunque se podría pensar que con el balón no es un argumento importante, el que no interfiera a la hora de utilizarlo da peso a que esté siendo tan importante en la Eurocopa.
Además, su reconversión a pivote le da la posibilidad muchas veces de ofrecer una salida de balón alternativa a Inglaterra. En varias ocasiones se le pudo ver cómo se incrustaba entre Cahill y Smalling, dando el balón a estos para que avanzaran unos metros y pudieran encontrar alguna vía de pase con mayor espacio. Y aunque Inglaterra no desplegó su mejor fútbol, si gozó de una mayor seguridad con balón e hizo las cosas con más determinación.
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