Firmino y Mané para llegar a Salah

Fotografía: theanfieldwrap.com

Que la delantera del Liverpool se codea con las mejores de Europa es un hecho. Jürgen Klopp ha lidiado con la marcha de Coutinho para que su equipo se resienta lo menos posible de cara a seguir mostrando la brillantez ofensiva que tienen en más de una ocasión. La llegada de Salah ha supuesto un positivo impacto dentro del equipo, y aunque con la llegada del egipcio algunas posiciones variaron dentro del XI, con el tiempo se ha confirmado que es un plus en ataque para el equipo de Merseyside. Y dentro del rol que ha otorgado el técnico alemán al jugador africano, ha tenido a su vez que buscar las vías para llegar a él. Es por eso que más allá de estadísticas, Klopp ha encajado a Firmino y Mané para conseguir lo mejor de Salah de cara a hacer el máximo daño al rival. Ambos son los encargados de conseguir llegar al máximo goleador del equipo, y dentro de todas las facilidades que les ofrece su entrenador, el rol de cada jugador es muy importante para conseguir el objetivo que busquen en cada ataque.

Firmino y Mané, los puentes hacia Salah

Para conseguir llegar a Salah, Jürgenn Klopp tiene dos jugadores muy relevantes de cara a las acciones ofensivas. Por un lado está Firmino, partiendo como punta pero sin serlo al uso, y por otro lado Mané, el cual parte desde la banda izquierda pero está en una temporada donde su rol va más allá de aprovechar los espacios y correr a encarar a los rivales como le hemos visto en otros momentos. Por su parte, el brasileño es el futbolista que mejor comprende todo lo que rodea al Liverpool al atacar. Podrá intervenir más o menos en los partidos, pero siempre suele hacerlo con bastante inteligencia. No siempre el contexto propicia poder encontrarle, pero sabe bien qué hacer cuando la pelota llega a sus pies. Es por esto que Klopp le otorga muchísima libertad de movimiento por todo el campo rival (sobre todo de tres cuartos de campo hacia delante). Y es ahí donde, cuando se va fuera del área, Salah aprovecha todos sus movimientos. Aunque a veces pueda dar la sensación de que está limitado como delantero, ni mucho menos. La llegada del egipcio ha permitido que Firmino no esté tan pendiente de ganar acciones en el área, y por eso aunque suele tender a caer hacia el costado izquierdo, cuando se coloca fuera de posición el equipo gana contundencia en el área con el egipcio. Estén más o menos lejos son dos jugadores que se suelen encontrar cuando tienen la pelota, y en ese sentido Firmino sabe buscar bien a su compañero de cara a la finalización. El brasileño está en una temporada donde tiene un gran peso, tanto en juego como en números. Sus 21 goles y 10 asistencias muestran que es un futbolista del que sacar partido sobre todo cerca del área rival. Además, 5 de sus asistencias han ido hacia Salah y 3 hacia Mané.

Por su parte el senegalés ha variado su forma de jugar respecto al pasado. Sobre todo, con la salida de Coutinho, Klopp parece haber dado una vuelta de tuerca a su fútbol. Y aunque no está a su mejor nivel todavía, su relevancia dentro de los ataques es grande. Sobre todo por lo que se mueve y pide el balón, en un gran número de ocasiones en corto. Porque si esté Liverpool tiene una virtud, es la de combinar en corto para pisar el área rival, estén más o menos lúcidos con balón. La llegada de Salah al equipo en un principio hizo que Mané tuviera que cambiar su posición y pasar a jugar a la banda izquierda. Jugando a pierna cambiada, su entrenador ha tratado de sacarle partido de otra forma. Sobre todo en cuanto a intervenciones, no para que fueran superiores, sino en zonas más interiores y donde su repercusión pudiera ser mayor. Debido a esta tendencia hacia el carril central, Mané ya no es el encargado de acaparar la banda izquierda del todo, sino que todo el espacio que genera se lo deja al lateral cuando se incorpora. Todo esto ha llevado a que el senegalés sea un jugador importante sin ir más lejos cuando los rivales se cierran más. Estas intervenciones en zonas distintas le están llevando a mejorar las asistencias, sobre todo por el hecho de que combina mejor y decide con mayor conocimiento del contexto. Es el tercer jugador del Liverpool que más disparos hace, también que goles lleva y asistencias da. De cara a llegar a la portería rival tiene mucho peso, y sus 15 goles y 8 asistencias son números bastante destacados. De estas últimas, 6 han ido a parar hacia Salah y 1 hacia Firmino.

Salah como argumento de finalización

El jugador en torno al que giran los ataques del Liverpool tiene nombre y apellidos: Mohamed Salah. Su llegada esta temporada han supuesto la solución que tanto le faltaba al Liverpool en más de una ocasión para ser más efectivo de cara a portería. Pero lejos de eso, aprovecha todo lo que sus compañeros generan para mostrar una gran contundencia en el área rival. Es por es oque pese a que parte desde la banda derecha, como es lógico para aprovechar sus conducciones o capacidad de uno contra uno, no siempre le buscan para que lo lleve a cabo. Las diagonales que traza de cara a desmarcarse dentro del área o las intervenciones que tiene dentro de ella son motivos suficientes para meter miedo a las defensas rivales. Su trabajo no suele ser el de ir generando ventajas desde la banda, sino la de sobre todo aprovechar los espacios y aprovechar las ventajas que puedan generar sus compañeros (Firmino y Mané sobre todo). Es ahí donde finalmente le suelen encontrar los futbolistas que le rodean, y rara vez el egipcio suele fallar. Recuperaciones tras presión, correr al espacio, combinaciones en espacios cortos o el regatear rivales...Salah acumula muchas cosas positivas para ser impredecible una vez su equipo tiene el balón. De esta forma, el rol del africano genera una triple conexión a distintos niveles. En un primer nivel Mané y Firmino, con los movimientos de Salah hacia el área rival, consiguen desplazarse hacia tres cuartos de campo, encontrarse, y generar muchas cosas. Esto no quiere decir que "le dejen de lado" para combinar entre ellos. Pero de los 3 es el que menos suele intervenir a la hora de tocar el balón. En un segundo nivel está Salah, el cual es la vía más fiable de cara a finalizar las jugadas. Es el futbolista que más goles, asistencias y disparos lleva del Liverpool, lo cual habla de su capacidad de encontrar ocasiones de peligro. Un total de 35 goles y 10 asistencias acumula en la presente temporada, números monstruosos para un jugador que prácticamente "debuta" en la liga (ya jugó con el Chelsea hace tiempo). Ha demostrado que su finalización no es mala, y aunque a veces tiende demasiado a hacerlo con su pierna izquierda, en el total de goles lleva 28 con la izquierda, 6 con la derecha y 1 de cabeza. Pero no solo en los goles acaba su importancia, ya que de sus 10 asistencias 4 de ellas han sido a Firmino, y 1 a Mané. De esta forma, Klopp tiene tres formas distintas de cerrar un triángulo que es casi perfecto ofensivamente.